en esta novela continúa el minucioso relato de los últimos años del dominio imperial británico en la India, iniciado en La joya de la Corona y proseguido en El día del Escorpión. La intrincada sociedad de memsahibs a la que pertenecen las mujeres de la familia Layton sirve ahora de marco a la conflictiva relación entre Mildred Layton, dominada por la nostalgia de los días del Imperio, la antigua maestra despreciada por sus orígenes mesocráticos.