Spider-Man, a veces traducido como Hombre Araña, es un personaje creado por los estadounidenses Stan Lee y Steve Ditko, e introducido en el cómic Amazing Fantasy n° 15, publicado por Marvel Comics en agosto de 1962. Se trata de un superhéroe que emplea sus habilidades sobrehumanas, reminiscentes de una araña, para combatir a otros supervillanos que persiguen fines siniestros. Su creación se remonta a principios de la década de 1960 a manera de respuesta ante el creciente interés del público adolescente en los cómics y el éxito de Los 4 Fantásticos. Tras su primera aparición en Amazing Fantasy, Marvel decidió producir una serie individual titulada The Amazing Spider-Man, cuyo ejemplar inicial salió a la venta en marzo de 1963. Desde entonces se han distribuido otros varios cómics relacionados con el personaje, así como otros productos que han derivado en el establecimiento de una franquicia de medios. Si bien posee múltiples versiones alternativas que han propiciado el desarrollo de un multiverso, los orígenes y rasgos principales de Spider-Man han permanecido mayormente invariables con el transcurso del tiempo. Generalmente su identidad secreta es Peter Parker, un joven huérfano neoyorquino que adquiere superpoderes después de ser mordido por una araña radiactiva, y cuya ideología como héroe se ve reflejada primordialmente en la expresión un gran poder conlleva una gran responsabilidad. Suele ser asociado con una personalidad bromista, amable, inventiva y optimista, lo que le ha llevado a ser catalogado como el vecino amigable de cualquiera lo cual, aunado a sus vivencias caracterizadas por los problemas cotidianos, atrajeron el interés del público al contrastar con el arquetipo de superhéroe de la industria.