Un Oesterheld ya políticamente lanzado, y un Breccia imparable en al experimentación, dan por resultado un libro que nos acerca las vidas de dos mitos argentinos del siglo XX, dos personajes reales a través de historietas adultas y polémicas. Además, en La vida del Che se presentan los dibujos de un principiante Enrique Breccia, hijo de Alberto.