"Nada me desalienta, ni aun el desaliento", escribe Ionesco. "No sé quién soy, no sé qué es lo que hago aquí." Las frases elegidas sugieren el tono de este libro, que reúne textos del gran escritor rumano. Estos artículos, crónicas y reportajes conmueven por su insistencia en presentar la ausencia de sentido, el imperio del mal y la decadencia de Occidente transformada en verdadera derrota como emblemas del drama contemporáneo. En ellos, el pensamiento político y la polémica ceden lugar a la obsesión por la infancia, los sueños y los recuerdos. ¿Qué otro escritor pudo transmitir con tanta sinceridad la angustia y la desesperación de la absurda vida humana? ¿Quién como él representó con toda la fuerza de la ingenuidad el asombro y la emoción del niño frente a lo irracional e inexplicable? El hombre cuestionado revela el pensamiento íntimo de uno de los grandes dramaturgos del siglo XX.