La piedra lunar es una ingeniosa y peculiar novela de misterio que está muy bien construida, ya que por un lado ofrece intriga al lector, a quien le depara más de una sorpresa y por otro lado cuenta con un aspecto costumbrista al retratar con bastante exactitud la sociedad de la época victoriana. Encorsetada y determinada por sus propias costumbres que incide en la supremacía de la clase alta, en la hipocresía y en el papel secundario al que se relega a la mujer. La historia transcurre en el año 1848 aunque al comienzo se nos narra un episodio ocurrido cincuenta años atrás donde se explica cómo llegó la dichosa piedra a la familia. Como en toda novela de suspense que se precie hay una investigación, unos sospechosos y unas pruebas que evaluar que conducirán al inspector a unas determinadas conclusiones aunque sin duda lo más importante para llegar al fondo del asunto serán los testimonios de los implicados.