Al regresar de Inglaterra, Hamlet, príncipe de Dinamarca, se encuentra con la fatal noticia de que su padre ha muerto. En su lugar, su tío Claudio ocupa ahora el trono y se ha casado con su madre, la reina Gertrudis. Esa noche el fantasma de su padre le revela que ha sido asesinado por el actual rey, y clama venganza. Compuesta entre 1599 y 1601, la obra cumbre de William Shakespeare es una historia de intrigas, tribulaciones, honor, ambición, amor y, sobre todo, venganza. Con un lenguaje refinado y la inclusión de monólogos memorables, el autor más influyente de la historia en habla inglesa le imprime a sus palabras una fuerza dramática que ha trascendido a lo largo de los siglos. MACBETH. Ambientada en la Escocia medieval y basada en un personaje real, Macbeth es una sangrienta tragedia sobre la traición y la ambición desmedida. Shakespeare la escribió probablemente en 1606, durante el reinado de Jacobo I, de origen escocés. Tentado por el mal, cumpliendo el vaticinio de tres brujas y avalado por una esposa sin escrúpulos, el noble Macbeth recurrirá al asesinato para acceder al trono y deshacerse de cualquier posible rival, aún del más inocente. Así, reina por el terror pero desafía al destino.