Los visigodos ejercieron una poderosa influencia sobre diversos países del Mediterráneo, como resultado de las guerras de conquista que emprendieron desde sus primitivas tierras, situadas junto al Danubio. Italia, Francia y España, entre otros, fueron los escenarios donde este pueblo bárbaro consolidó gran parte de su evolución política, militar y cultural. El transcurso de los siglos, sin embargo, ha debilitado el recuerdo de los visigodos. Este libro se propone exponer su protagonismo histórico, y ofrecer una indispensable valoración de la influencia que el orden social, el derecho y la cultura visigóticos ejercieron en el ulterior desarrollo europeo.