RESEÑA: Las comedoras de pecados existieron en Gran Bretaña hasta hace aproximadamente un siglo, ya nos lo advierte Megan Campisi en la introducción de esta novela "escrita a partir de la fantasía. Pasar libre de pecados al otro mundo y alcanzar la gloria divina, ¿qué buen creyente no lo desearía? Y todo porque unas mujeres silenciosas se dieran un banquete sobre tu féretro. Pero ¿y si la realidad fuera más compleja que esto? ¿Y si ser una comedora de pecados implicase verse envuelta en tramas políticas, conspiraciones contra la corona e intentos de homicidio?