SINOPSIS: Es una novela realista que retrata, sin pelos en la lengua, la vida en el mundo rural de los años sesenta. La acción se desarrolla en un cortijo y nos presenta dos realidades enfrentadas: la de los señoritos y la de sus sirvientes. Veremos a los primeros oprimir a los segundos, someterles a sus caprichos y tratarles con total falta de consideración. Los segundos, ignorantes, analfabetos, sumisos, resignados, llevan una vida que apenas merece ser vivida. El autor no nos maquilla nada y hasta el lenguaje es crudo, soez, campestre, como un dialecto propio en el que apenas se reconoce el español urbano actual.