El color que cayó del cielo es un relato escrito por Howard Phillips Lovecraft. El título hace referencia al color de una entidad venida del espacio exterior, color que no se corresponde con ninguno del espectro visible conocido por los humanos. Narrado en primera persona, al igual que gran parte de los relatos de Lovecraft. Aunque los temas son similares a los característicos del Horror Cósmico, este relato los aborda de una forma más sutil, ya que no aparece una criatura que sea físicamente aterradora. Lo inquietante aquí pasaría a ser el concepto que representa la entidad y no tanto su aspecto. El relato nos llega a través de un joven ingeniero encargado de realizar una serie de estudios del terreno en el que se tiene previsto construir un embalse. En uno de los reconocimientos que hace del lugar encuentra una zona extrañamente árida a la que los lugareños evitan. El lugar, conocido como el Erial maldito, es un páramo desolado en el que la vegetación no crece y el suelo presenta una rara tonalidad grisácea. Intrigado por la mortecina apariencia del lugar, el joven pregunta a un anciano del lugar, de nombre Ammi Pierce. El lugareño, a pesar de las reticencias iniciales, lo pone en antecedentes de los hechos que transformaron la zona más fértil del lugar en el lugar de pesadilla en el que se ha convertido, y cómo los Gardner, la familia de campesinos que explotaban felizmente el lugar, tuvieron un final mucho peor que la muerte atacados por la locura y un extraña enfermedad que les deshacía la carne.
Nivel Bibliográfico:
Monográfico
Nota normalizada:
CONTIENE: Prólogo; La llamada de Cthulhu; El color que cayó del cielo; El que susurraba en las tinieblas; En las montañas alucinantes.