RESEÑA: Las tribulaciones de este joven judío, Marcus Messner, son contadas en primera persona por él mismo. A través de sus comentarios percibimos que es muy maduro, serio y responsable para su edad; descubrimos que su padre sufre una obsesión con la posible perdida de esa sensatez, y que esa manía lleva al hijo a viajar lejos, a una universidad de otro estado, para evadirse de su padre. Sus actos, pensamientos y emociones nos irán demostrando poco a poco que la paranoia del padre forma parte también de su carácter, y que su lucha por alejarse del padre le acerca peligrosamente a lo que odia. El complejo mundo universitario de los cincuenta para un chico judío de barrio hará el resto. Todo se agravará tanto en lo personal, lo familiar, lo amoroso y lo estudiantil hasta cubrirle de una âindignaciónâ absoluta de la cual no es capaz de convencer siquiera al lector, que demostrará lo radical de su concepción de la vida.