RESEÑA: Su protagonista, Horïa, vive con un viejo sirviente a los pies de una montaña africana; al final de su vida sólo le queda el recuerdo de sus dos hijos y la fidelidad a su tierra. Hasta aquí la tradición, a la que Tlili opondrá, de un modo algo forzado, la aparente hostilidad y arbitrariedad del progreso.