En vísperas de su tan temido cumpleaños número 30, Marina Palmer se ve envuelta en una espiral de frustraciones y ansiedad. Hastiada de la rutina, a la exitosa ejecutiva plucitaria - con terapia de diván tres veces por semana y sin pareja estable - le hacía falta una pasión verdadera. como por capricho, viaja de vacaciones a Buenos Aires, y en una milonga de almagro a las dos de la mañana descubre lo que tanto anhelaba: ¡el tango! Rendida a los pies de la sensual danza argentina, decide dejar de lado su carrera. Nueva York y la búsqueda desesperada del hombre de su vida para abrise camino en el baile Profesional.