En 1872, el escritor Hilario Ascasubi publicó en París Santos Vega o los mellizos de la flor, extenso poema en el que Santos Vega desempeña el papel de narrador de la historia de los mellizos Luis y Jacinto. Santos Vega conoce en una pulpería a Rufo Tolosa, quien lo invita a su rancho donde le cuenta la historia de aquellos. Esa leyenda local llegó a Ascasubi asociada con otros sucesos de una época muy anterior, durante la cual terribles invasiones de indios pampas asolaban la zona de frontera.