RESEÑA: Combet es francés y Schrumm-Schrumm es su primer libro. Le llevó cinco años escribirlo y cuando apareció, 1966, consternó y deslumbró a la crítica. "Es la novela más original que nos haya sido dado leer desde hace mucho tiempo" sentenció Colin-Simard en Le Journal du Dimanche. En 1968 publicó un cuento alegórico, Factice ou les hommes oiseaux, y tres años más tarde Mort et passion de Felix C. Scribator, obras a las cuales también les cuadran los calificativos que Mathie Galey aplicó a Schrumm-Schrumm: "Vigorosa, poética, inquietante, fascinante."